Voces euskaldunes en el franquismo

SERÁ a mediados del mes de noviembre, pero Berango vive ya con nerviosismo y emoción los días previos con la preparación del homenaje que se tributará a los grupos vocales Alaitasuna e Itxaropena, el germen de lo que es hoy la popular agrupación de folk Simón de Otxandotegi. Ellos fueron los pioneros, quienes se atrevieron a desafiar al franquismo en los 70, interpretando repertorios en euskera. "No era fácil, había que pedir permiso al Gobierno Civil", destacan desde la organización del homenaje, en el que participarán unas 250 personas con la interpretación de una canción dedicada a Berango.

Esto también es memoria histórica, aunque no tenga nada que ver con fosas. Berango quiere rendir cuentas con aquellos pioneros euskaltzales que, en los años 70, dieron un paso adelante y se atrevieron a formar grupos corales que se arriesgaron a interpretar canciones en euskera. Y la implicación de los vecinos será total, ya que hasta 250 personas participarán en el homenaje que se rendirá a los grupos musicales Alaitasuna e Itxaropena de Berango, pioneros con sus voces en la labor de sacar el euskera a la calle.

En la cita, que tendrá lugar entre el 19 y el 21 de noviembre, cantarán los coros de la parroquia y del Hogar del Jubilado e intervendrán, también, la Escuela de Música y escolares locales junto a Simón de Otxandategi, el grupo que se encargará de organizar el evento y que, hoy en día, todavía deja espacio en sus filas a algunos de aquellos cantantes pioneros de los 70.

Alaitasuna e Itxaropena fueron dos agrupaciones que surgieron durante la dictadura y asumieron la complicada tarea de divulgar la nueva canción vasca. "Cantar entonces en euskera era difícil. Dimos muchas actuaciones en festivales junto a Gontzal Mendibil, Estitxu o Pantxoa ta Peio, en concursos y hasta en radios. Incluso estuvimos a punto de grabar un disco en una época en la que había que pedir los permisos correspondientes a la Policía y Gobierno Civil después de traducir las canciones al castellano", recuerda Iñaki González, director de Simón de Otxandategi. "El entonces párroco de Berango, don Lorenzo, prestó su apoyo legal a Alaitasuna, muy necesario en esas fechas", recuerda.

El actual director del grupo de danzas formó parte de Alaitasuna, que nació a finales de los 70. Pero la semilla germinó con éxito y, en 1972, surgió el grupo Itxaropena, compuesto por siete niños de 7 a 9 años de edad. La dirección, elección de canciones y arreglos de voces corría a cargo de González y contaban con el acompañamiento a la guitarra de María Elena Uriarte. La huella aún perdura porque algunos componentes, como el propio Iñaki, han pasado a integrarse en Simón de Otxandategi, un grupo empeñado en mantener y difundir el folklore y que cuenta con dantzaris, músicos y un grupo vocal.

Precisamente de esta agrupación surgió la idea de organizar un evento especial que se desea repetir anualmente, cada mes de noviembre. "Tras 40 años, queremos recordar a esas personas su implicación en la canción vasca y resaltar el logro de mantener nuestras señas de identidad en unos tiempos de gran dificultad", según González. El broche de este tributo, que acogerán varios festivales de canto, tendrá lugar con la participación de todos los grupos involucrados que participarán conjuntamente en la interpretación de una canción dedicada a Berango. "Quizá una de las señas más importantes de aquellos grupos es que nos dejaron realizar los arreglos musicales de una canción para Berango", comenta González. A las autoridades locales se les entregará de forma simbólica esta canción.

"Aunque desde hace un mes todos los grupos ensayan una vez a la semana para la actuación, la participación está abierta a todos los vecinos", explica González. Solo es preciso acudir al ensayo que tendrá lugar el 16 de noviembre, a las 20.00 horas, en los locales de Simón de Otxandategi, situados en la parte trasera del edificio consistorial.

Voces euskaldunes en el franquismo

SERÁ a mediados del mes de noviembre, pero Berango vive ya con nerviosismo y emoción los días previos con la preparación del homenaje que se tributará a los grupos vocales Alaitasuna e Itxaropena, el germen de lo que es hoy la popular agrupación de folk Simón de Otxandotegi. Ellos fueron los pioneros, quienes se atrevieron a desafiar al franquismo en los 70, interpretando repertorios en euskera. "No era fácil, había que pedir permiso al Gobierno Civil", destacan desde la organización del homenaje, en el que participarán unas 250 personas con la interpretación de una canción dedicada a Berango.

Esto también es memoria histórica, aunque no tenga nada que ver con fosas. Berango quiere rendir cuentas con aquellos pioneros euskaltzales que, en los años 70, dieron un paso adelante y se atrevieron a formar grupos corales que se arriesgaron a interpretar canciones en euskera. Y la implicación de los vecinos será total, ya que hasta 250 personas participarán en el homenaje que se rendirá a los grupos musicales Alaitasuna e Itxaropena de Berango, pioneros con sus voces en la labor de sacar el euskera a la calle.

En la cita, que tendrá lugar entre el 19 y el 21 de noviembre, cantarán los coros de la parroquia y del Hogar del Jubilado e intervendrán, también, la Escuela de Música y escolares locales junto a Simón de Otxandategi, el grupo que se encargará de organizar el evento y que, hoy en día, todavía deja espacio en sus filas a algunos de aquellos cantantes pioneros de los 70.

Alaitasuna e Itxaropena fueron dos agrupaciones que surgieron durante la dictadura y asumieron la complicada tarea de divulgar la nueva canción vasca. "Cantar entonces en euskera era difícil. Dimos muchas actuaciones en festivales junto a Gontzal Mendibil, Estitxu o Pantxoa ta Peio, en concursos y hasta en radios. Incluso estuvimos a punto de grabar un disco en una época en la que había que pedir los permisos correspondientes a la Policía y Gobierno Civil después de traducir las canciones al castellano", recuerda Iñaki González, director de Simón de Otxandategi. "El entonces párroco de Berango, don Lorenzo, prestó su apoyo legal a Alaitasuna, muy necesario en esas fechas", recuerda.

El actual director del grupo de danzas formó parte de Alaitasuna, que nació a finales de los 70. Pero la semilla germinó con éxito y, en 1972, surgió el grupo Itxaropena, compuesto por siete niños de 7 a 9 años de edad. La dirección, elección de canciones y arreglos de voces corría a cargo de González y contaban con el acompañamiento a la guitarra de María Elena Uriarte. La huella aún perdura porque algunos componentes, como el propio Iñaki, han pasado a integrarse en Simón de Otxandategi, un grupo empeñado en mantener y difundir el folklore y que cuenta con dantzaris, músicos y un grupo vocal.

Precisamente de esta agrupación surgió la idea de organizar un evento especial que se desea repetir anualmente, cada mes de noviembre. "Tras 40 años, queremos recordar a esas personas su implicación en la canción vasca y resaltar el logro de mantener nuestras señas de identidad en unos tiempos de gran dificultad", según González. El broche de este tributo, que acogerán varios festivales de canto, tendrá lugar con la participación de todos los grupos involucrados que participarán conjuntamente en la interpretación de una canción dedicada a Berango. "Quizá una de las señas más importantes de aquellos grupos es que nos dejaron realizar los arreglos musicales de una canción para Berango", comenta González. A las autoridades locales se les entregará de forma simbólica esta canción.

"Aunque desde hace un mes todos los grupos ensayan una vez a la semana para la actuación, la participación está abierta a todos los vecinos", explica González. Solo es preciso acudir al ensayo que tendrá lugar el 16 de noviembre, a las 20.00 horas, en los locales de Simón de Otxandategi, situados en la parte trasera del edificio consistorial.